
El trabajo de catalogación al Archivo de Francisco Brines avanza ahora sobre uno de sus conjuntos más valiosos y personales: la correspondencia. En estos meses, el equipo se centra en la organización, descripción y conservación de las cartas que el poeta intercambió a lo largo de su vida, tanto en el ámbito íntimo como en el literario.
Entre los documentos se encuentran cartas personales, notas manuscritas y extensos intercambios con figuras destacadas de la literatura española del siglo XX, especialmente con poetas de la Generación del 27 y también con autores de la llamada Generación del 50. Estas misivas ofrecen una mirada privilegiada a las amistades, reflexiones y debates literarios que marcaron toda una época.
Paralelamente, se está llevando a cabo un proceso de digitalización que permitirá preservar y difundir este legado epistolar. Cada carta se escanea con criterios de conservación documental y se guarda en formatos digitales de alta calidad, asegurando así su acceso futuro para investigadores y lectores interesados en la figura y el entorno cultural de Brines.
El archivo trabaja igualmente en la preservación física de los originales, empleando materiales adecuados para su conservación a largo plazo: fundas libres de ácido, carpetas neutras y condiciones ambientales controladas que garantizan la integridad de los documentos.



